Una extraña leyenda ha convertido casi en santa a este personaje, al que camioneros y demás conductores ofrendan agua en busca de buenos viajes. Es la Difunta Correa. Existe otra modalidad en la figura de un hombre, el denominado Gauchito Gil. En ambos casos, los templos donde rendirles culto no tienen nada que envidiar al mejor kitsch posmoderno.
viernes, 26 de marzo de 2010
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Antonio Mamerto Gil Nuñez, para los amigos "el Gauchito"
ResponderEliminarjaja
Increíbles paisajes y diarios de rutas.
Espero que sigan a buen paso y disfrutando mucho de todo todo! (hasta locolombia me imagino)
Mientras tanto yo sigo su viaje (mental)
muacs!