miércoles, 16 de junio de 2010

Quito



Trataba de explicarle como era su ciudad, pero sus palabras atropelladas hablaban de todo a la vez, de calles, barrios, anchura, niebla, volcanes, alrededores; mezclándose cada vez más con una ciudad no tan confusa.
- Dibujémosla, hagamos un esquema - le dijo - sintetizar ayuda a comprender -
Entonces trazaron una linea recta, larga, muy larga. La rodearon de colinas, situadas irregularmente, tanto que algunas estaban incluso encima de la linea recta.
- Dibujémosla otra vez entonces, adaptada a los montes - volvió a decirle.
- De acuerdo, pero ahora ya no es recta, serpentea y se ensancha y se estrecha y esta fragmentada... -
- Sí, pero se ve desde todas las colinas. Yo, pondría ahí la ciudad vieja, la colonial, la que me recuerda a mi patria de exiliado -
- Pero ahí no puede crecer mucho - contestó.
- ¿Y que más da ? No va a crecer hasta dentro de 300 años -
- Cierto, ¿pero como la hará? -
- Fácil, siguiendo la linea. Hacia el norte, los barrios nuevos y ricos, impersonales torres y zonas de bares y diversión. Hacia el sur, la monotonía de barrios obreros y pobres, problemáticos y superpoblados -
- Es verdad - dijo - y hacia el este y el oeste, los cerros los contemplan. ¿Porque no hacer parques y miradores allá? desde algunos puede verse hasta el Cotopaxi -
- Sí, y un teleférico que suba al Pichincha, símbolo de la ciudad -
- Y el barrio viejo, mezcla un poco de todo, con sus cientos de iglesias, de turistas, de comercios, de gobierno, hará de crisol y de unión -
- Buena idea, será el lugar que todos sentirán como suyo, esa será su ciudad, ese será su Quito, por encima de su barrio, su torre, su Guápulo bohemio, su urbanización cerrada, su suburbio lánguido -
- Cuando venga de visita será el lugar que me muestres - le aseguró.
- Y en verdad es lindo -
- Sí lo es - replicó - tejas  y blanco en una retícula derretida e inclinada -
- Además una ciudad viva, porque la parte nueva, aunque anodina es bien funcional -
- ¿Y la zona obrera? -
- Aunque con el trolebus queda ya muy cerca, mejor ni enseñarla, ¿no se oculta en el teatro la tramoya? -
- Tienes razón siempre tiene que haber una trastienda -



Y así en esta conversación entre arquitecto, promotor, habitante, colono, indígena, criollo y visitante, con la ciudad como maqueta, comprendieron Quito; y les atraparon sus encantos, su clima, su vegetación, sus inútiles iglesias con sus vacíos claustros, sus empinadas calles, sus balcones, su tipografía unificadora, sus colorines, su estupenda comida, sus amables y encantadores habitantes, su juerga nocturna con Sucre de cómplice en ese barrio de casas residenciales convertido en un Viso salsero, su museo Guayasamín, sus enormes plazas y sus aviones urbanos, con su altura que ahoga, tan ecuatoriana, tan americana... 
Desde entonces Quito, es su lindo Quito.  
                                
                                              

martes, 15 de junio de 2010

Top Cinco






Canciones populares:
1- Marta Sanchez y Carlos Baute - Colgando en tus manos
http://www.youtube.com/watch?v=qExd-3oCTl4
2- Luis Enrique - Yo no se mañana
http://www.youtube.com/watch?v=AXIgjQFMCiI
3- Grupo Aventura - Obsesión
http://www.youtube.com/watch?v=KaVnA88oNTg
4- Pitbull - Iknow you want me
http://www.youtube.com/watch?v=E2tMV96xULk
5- Grupo Aventura - Dos locos











Fiestas/Momentos:
1- Fiesta con lugareños - Santa Teresa
2- Bajada yungas en bicicleta - La Paz
3- Concierto Sabina - Quito
4- Camping Villa la Angustura
5- Asado a la luna - Isla del Sol

Ciudades:
1- Cusco
2- Valparaiso
3- La Paz
4- Arequipa
5- Quito
6- Rio Gallegos

Mercados:
1- Sucre
2- Arequipa
3- Chiclayo
4- Cusco
5- Otabalo

Pifies:
1- Almuerzo con Pichin - Arequipa
2- Castillo de Arena (Hermógenes Kipildor) - Salta
3- Autobus a Canoa (horas y horas, solo 80 km.)
4- Chan Chan Tour - Trujillo
5- Valle Sagrado Tour - Machu Pichu

Frases:
1- Acording to Hiram Bingham..
2- Eres de España? Entonces hablas español!
3- Tenemos el quei de leche, de leche el quei... (ricos cakes de desayuno)

Caminatas
1- Machu Pichu
2- Atacama
3- Chalten
4- Isla del Sol
5- Decenso Baños - Puyo

Escenarios
1- San Pedro de Atacama
2- Aguas Calientes
3- Bariloche
4- Huacachina
5- Cusco

jueves, 10 de junio de 2010

Cuenca



Cuenca recuerda que Ecuador no es solo la mitad del mundo, litoral y Oriente, sino también que los Andes acaban aquí, aunque ahora en su mayoría en forma de volcanes. A 2500 metros de altura y casi con una primavera continua, la ciudad es el recuerdo de otras ciudades encontradas en el camino, también verdes, también coloniales. Monasterios, iglesias, plazas, revocos, tejas curvas, balcones y como la Cuenca ibérica casas colgantes sobre la quebrada de un río. Sobre su ribera un parque urbano que permite mojarse en sus aguas y orillas sin límites ni barandillas, discurriendo naturalmente al borde de la ciudad.

Los patios y claustros de muchos edificios se han reconvertido usándose ahora como lugares de reunión, bares, restaurantes o salsa de conciertos. También lo hacen algunas terrazas que eligen si mirar al río o a la sierra de los alrededores. Un cierto ambiente cultural pasea por la ciudad. Títeres y teatro en la plaza de la catedral, conciertos variados al atardecer, librerías diversas, mercados... Un lugar tranquilo y animado, festivo y reposado, donde pasar las tardes en patios entoldados y atascarse más tiempo del previsto inicialmente.



Compañeros de viaje

Crítica de Cultura y Sociedad I - T.W. Adorno
Farhenheit 451 - Ray Bradbury
Crónicas Marcianas - Ray Bradbury
La Colmena - Camilo José Cela
El Corazón de las Tinieblas - Joseph Conrad
Bestiario - Julio Cortázar
Historias de Cronopios y de Famas - Julio Cortázar
Discurso del Método - Rene Descartes
Diario de Ana Frank - Ana Frank
Poeta en Nueva York - Federico García Lorca
La Illiada - Homero
Siddhartha - Hermann Hesse
El Lobo Estepario - Hermann Hesse
La Conjura de los Necios - John Kennedy Toole
Campos de Castilla - Antonio Machado
Poesía Urbana - Luis Garcia Montero
1984 - George Orwell
Rebelión en la Granja - George Orwell
El Libro del Desasosiego - Fernando Pessoa
Pedro Páramo - Juan Rulfo
Walden - Henry David Thoreau
La Ciudad y los Perros - Mario Vargas LLosa

miércoles, 9 de junio de 2010

Objetos perdidos

1- Gafas de sol x 2
2- Mapa
3- Binoculares
4- Cargador teléfono x 2
5- Llama (escultura)
6- Memoria cámara (en suspenso)
7- Pantalones Cortos (recuperado)
8- Sombrero x 2 (recuperados)
9- Pen Drive
10- Forro Polar
11- Portaminas


No esta tan mal, al final una cosa cada 9 días.......

lunes, 7 de junio de 2010

Futuro

Hoy me desperté y no tenia bien claro que hacer con mi vida. 
Y si me armo una banda??????



Agradecimiento 10



Gracias Christian, por mostrarnos y explicarnos Quito, por cuidar nuestras pertenencias, por el itinerario playero y sobre todo por desvelarnos los misterios de la comida ecuatoriana, esas recetas viajan con nosotros. Fuerte abrazo.

domingo, 6 de junio de 2010

Máncora

La costa norte de Perú son lugares playeros con ambiente de surf, olas y bañadores. Lugares donde pararse unos días a no hacer nada. Mirar el mar y los ocasos, ver rojos y violetas, recorrer las mareas, olvidarse del tiempo, contemplar la rutina indolente del descanso, andar sobre la arena y el mar, tostarse como el pan, en resumen, seguir ese viejo lema californiano del "life`s a beach".


Sienta bien pararse, nos damos cuenta que viajar es cansado, no hay descanso. El cerebro y los sentidos trabajan incesantemente, siempre abiertos y receptivos. Comunicación e información, muy diversas. Esperada y sorprendente. Se recibe y analiza. Todos los sentidos trabajan. Gente nueva, nuevos modos de mirar, analizar, hacer y comprender. Razonamientos inéditos. Pero no vale con recoger, después esta la disección, la razón, la abstracción, para uniendo sensaciones y mente obtener conclusiones. Aprender y aprender para vivir, para saber, para decidir, para poder caminar. Eso es lo que vinimos a buscar, lo único que nos vamos a llevar.



Estos lugares no son nada en realidad, mas que la libertad de la costa y el descanso de la meditación. Hay alojamientos razonables con cierto respeto hacia el entorno y buen ambiente. En especial Máncora. Y volvemos a parar, con el cerebro en blanco y un abandono total. Las horas vuelven a contarse por días, por ocasos o por mareas. Días en los que estar más tiempo tumbado que de pie, donde sumergir el reloj en el mar, donde acabar los libros que el viaje y el movimiento estiran demasiado. Momentos de rascarse con la arena, de ver salir y regresar las barcas del mar, de dormir cuando y hasta donde dicta el sueño. Horas de caminar sin rumbo ni necesidad, de eternidad y escritura, de dibujar, cuando la única ocupación es ver las puestas de sol.

Lima

Cerca de la soledad está la multitud, en forma de 8 millones de personas que habitan Lima. Una ciudad formada por una amalgama de diversos municipios, desde los miserables, desérticos, polvorientos e inestables de Amauta o Ate Vitarte, hasta los frondosos y selectos de San Isidro, Barranco o Miraflores. 
Los primeros, informales, casi ilegales, formados a golpe de autoconstrucción y chapa metálica. Confiando en la suerte para eludir deslizamientos, hundimientos o derrumbes. Confiando en el camión cisterna diario para poder cocinar o lavar, para beber. A casi dos horas de autobus del centro urbano, olvidados por censos y sociedad, sin derechos ni obligaciones, sin sistema, fuera de él queriendo estar dentro.



Los segundos conformados con un urbanismo de jardinería  y linea, primera, de playa. Torres, blancas, de lujosos apartamentos. Terrazas, vidrios sin carpintería, deslizantes para abrir las viviendas como enormes escaparates al mar. Palmeras, flores, parques, centros comerciales, paseos marítimos, deportistas. Siempre mirando al mar, aunque este varios metros por debajo, sin conexión con la ciudad, protegido por barrancos pedregosos con miedo a las escaleras.



Lima es un desierto, un basural polvoriento, anónima e informal. Lima es hedonismo, culto al bello límite marítimo, viviendas exhibicionistas protegidas por vallas electrificadas. Lugares agradables, amables con la vida. Lugares terribles, marginales, incaminables, inestables como barcos en la tormenta.
En medio de las dos Limas, perdido entre turistas y autopistas, el centro histórico, como un centro comercial de las afueras, inconexo, roto, vivo y algo fuera de lugar. Casas coloniales, balcones, iglesias, calles sin coches, con peatones, sobrevivien como lugar de unión de todo lo que pasa en la ciudad.


Lima, unión de discontinuidades, urbanismo sin trabar, contraste, saltos, desuniones, contraste con otras ciudades del país, contraste consigo misma.

sábado, 5 de junio de 2010

Machu Picchu




Aguas Calientes (lo malo).
Nada entiende de nada más que de dinero quien permitió y permite el funcionamiento de uno de los lugares más feos del Perú y sin duda el más caro. Aquí afila sus colmillos el ave carroñera del turismo. A este pueblo solo puede accederse andando o por tren, pero el billete, solo permitido para turistas, no para peruanos, cuesta lo mismo que cuatro horas de alta velocidad europea. Cubre un trayecto de 40 km y curiosamente es un monopolio,en cesión del expresidente Fujimori, a una empresa anglochilena. De momento no hay planes para arreglar y terminar la carretera que llegaba hasta aquí. Un incomodo tren millonario que carga turistas como si fueran ganado. Por supuesto con retraso. 
El pueblo es su hermano gemelo. Una fonda en el camino, y no hay otra si se quiere llegar al amanecer a la ciudad sagrada. Un lugar funesto donde solo hay tiendas, restaurantes y hoteles sin ventanas. A precio de Central Park. Y queda demasiado claro, a pesar de todos los discursos patrióticos, sobre los ancestros, la estirpe y los incas, que Machu Picchu, es solo un maldito negocio, una máquina de fabricar soles, un sol que a diferencia del incaico, corrompe todo lo que toca.



Machu Picchu (lo bueno).
El ascenso a la cuidad se inicia a las cuatro de la madrugada. Es un ascenso loco, inmisiricorde, en realidad una escalera que corta la montaña sin descanso y se eleva mas de 450 m, casi 110 plantas de escalones irregulares. La subida, en grupo con otros grupos, alumbrada por linternas y la luna, tiene un aire de peregrinación, de emoción colectiva, de esperanza, de ansiedad, de éxito cercano; presagia la llegada de la meta deseada, el premio al sudor de varios días. La subida cuesta una hora, la respiración y varios litros de agua. También la ruptura del engaño en forma de una interminable cola de expedicionarios y sus guías. La sensación de saquear un lugar sagrado.


A lo largo del dia las emociones contrarias se suceden y pugnan por vencer en la razón y el sentimiento.
El desvelamiento lento, mágico y silencioso de las piedras y los picos cercanos a través de la niebla celta, pelea duramente con los gritos, el mal inglés y el desconocimiento de los supuestos guías, que convierten el entorno en una cómica maqueta. Las enormes piedras, las terrazas acrobáticas, la construcción sencilla y majestuosa, imponente en su orden y estructura, batallan con los cientos de gringos que deambulan sin entender nada, haciéndose la foto bromista lista para el facebook o algún similar. La subida increible, vertical al Huayna Picchu, sus locas terrazas de cultivo en las aristas cimeras, sus vistas de postal sobre todo el conjunto y los valles circundantes, luchan a muerte contra la masificación, los grupos organizados, la venta de postales, los gritos de la gente y la nostalgia de esa escena en la que el Che y un amigo, solos, sobre una roca, reflexionan.




Conforme avanza el dia (hemos entrado a las 06:30 am) la gente se cansa, poco a poco se aburre de ver piedras aunque estén unas encima de otras, y los grupos apuran sus horas marcadas de visita. El lugar se vacia lentamente, el silencio suena cada vez más en las alturas y ascendiendo ligeramente sobre el cerro Machu Picchu, encontramos una roca sobre la que registrar en nuestra memoria la ciudad... y la gente ya ni se ve, quedan algunos pájaros, llamas y el recinto. 
Entonces todo se comprende, se entiende la disposición del conjunto y la locura de los incas, empeñados en construir en lugares inverosímiles, casi imposibles, casi tan altos como su dios. Y se observa que el lugar, la cuidad, todo, tiene, se crea en algo o no, una cierta energía, un cierto magnetismo, espiritualidad, trascendencia... y es fácil afirmar con los incas que si desde allí no se entra en conexión con el cielo y sus estrellas, con el mundo, con la mente y las emociones humanas, entonces desde ningún lugar es posible hacerlo.
Seguimos allí parados, mirando, entendiendo, aprendiendo, sorprendidos, admirados, parados, mirando, contemplando, siendo parte del lugar... mucho rato. Hasta que nos echan.





miércoles, 2 de junio de 2010

Agradecimiento 9



En Cuenca, en una terraza a la medianoche, viendo un concierto de rock despues de muchos días de cumbia, salsa y musica andina, se nos acercó un borracho, Y ya véis, la vida es aquí más interesante y da más información que en un despacho; así que tras invitarnos a unas cañas e integrarnos en una fiesta que parecía una boda, nos habló sobre el concierto de Joaquín Sabina en Quito, el sábado 29. Y allá fuimos, a cantar y disfrutar.
Este agradecimiento es para ambos, para el incontinente borracho charlatan que nos dió la noticia y para Sabina por un estupendo concierto después de muchos años.

martes, 1 de junio de 2010

Santa Teresa

Santa Teresa en uno de los caminos del Inka, es una fea acumulación de edificios de periferia urbana establecidos por oposición al paisaje, un horror de colorines que esperamos algún dia camufle la selva.
Por la noche, un paseo para ver ...
nunca se sabe lo que se va a ver o a encontrar, normalmente nada, pero en ocasiones, en ocasiones como esta, dimos de bruces con la fiesta de la Cruces. Fiesta religiosa que se celebra en todo el Perú y en cada población. Una visita a la iglesia, otra al cementerio, una banda de música y más tarde unas mesas en la calle, cerveza y chicha hasta morir. Para cuando nosotros llegamos el entendimiento esta bastante nublado; la gente nos invita a sentarnos y acompañarlos. Son todos locales y el ofrecimiento mezcla curiosidad, exitación, ganas de conocer, ganas de mostrar, orgullo local y visión de mujeres gringas...
Así mientras ellas son invitadas a bailar frenticamente, una y otra vez, a nosotros nos sirven cerveza como si estuvieramos en una competición. Una batalla de litro tras otro. Nos dicen que todo es gratis. El dueño del bar. Esa noche todo corre de su cuenta. Más baile, más cerveza, preguntas como no, sobre futbol y origen, pero también destinos y costumbres. Más cerveza, más baile, invitación a tocar con la banda, risas al comprobar que somos incapaces de hacer sonar la trompeta o el saxofón.
Reímos nosotros pues cada vez que una chica del grupo sale a bailar nosotros recibimos como premio un litro.... hasta que las mujeres nos sacan a bailar a nosotros, entonces el premio es un vaso de chicha, la cerveza inca elaborada por las mujeres y fermentada gracias a su saliva. Hay que bebersela de un trago. Y hay que bailar. Es fácil porque la banda solo se sabe dos temas, que suenan ininterrumpidamente desde el principio de la tarde. Y danzamos, danzamos como malditos.
Más cerveza, más chicha, gente doblada sobre las mesas, hombres que ya no controlan su verbo ni su saliva, chicha chorreando por las camisas y las jarras, mujeres que apenas se tienen en pie....

Bendita fiesta local.
La hora de huir...

viernes, 28 de mayo de 2010

Grandes ideas o lo que se aprende viajando

Esta entrada esta dedicada a todos aquellos que pensais que viajar es estar de vacaciones, a todos aquellos que creeis que viajar es lo mismo que hacer turismo, a todos aquellos que nos imagináis holgazaneando en la playa o en cualquier otro lado sin hacer nada mas que contribuir a la fortuna de Quilmes, Pilsener, Paceña, Cusqueña o San Miguel. Para todos vosotros la demostración de que viajar es aprender, es conocimiento, continuo y sorprendente.

jueves, 27 de mayo de 2010

Desierto



En Ica, concretamente en Huacachina terminan por un tiempo las reflexiones. La piscina, las tumbonas y el sol anulan de hecho, todo pensamiento. Triunfa el hedonismo. Sol, un baño, sol, una cerveza, sol, un paseo por este extraño oasis rodeado de un desierto de dunas de arena. Monticulos de enorme altura se extienden desde aquí hasta el mar y casi hasta Lima, cambiando su disposición según el viento diario.
Un lugar magnifico para ver el ocaso, para acampar bajo las estrellas junto al Pacífico; aunque nosotros nos vamos igual que llegamos, con un buggie que frenéticemente, al mejor estilo del París-Dakar nos conduce a saltos y planeando sobre la arena de nuevo al hotel tras un par de horas de sandboard.
El desierto habla de la dureza del sol, de la belleza de lo insondable, de la atracción de lo infinito, de la estética de la monotonia y la repetición, de los matices de lo uniforme, de la llamada de lo desconocido, o simplemente de una tarde al sol, corriendo y deslizandonos por la arena.





lunes, 24 de mayo de 2010

Arequípa



La segunda ciudad blanca del viaje aparece colonial, mestiza, frondosa, luminosa y colorida en un significativo contraste con su polvoriento y seco entorno de altiplano, rematada por dos enormes montañas volcánicas, visibles desde toda la ciudad, especialmente el amenazante Misti que se eleva junto a Arequipa en medio de la estepa arenosa. 
Los patios y su secuencia, su concatenación, sus recorridos espaciales y aéreos definen la ciudad, que encierra su espacio privado y público al aire libre con gruesos muros de casas coloniales y claustros conventuales. Su uso como lugares de ocio, trabajo o servicios dándolos a la urbe de modo que esta se extiende por el interior de la masa edificada, logran un dificil equilibrio entre tranquilidad, privacidad y ciudad, sin que esta desaparezca. El patio se ha convertido en plaza, en plazas que van tornando más privadas y silenciosas cuanto más profundas. Como no acordarse de Barragan y de su obra, Mexico volando sobre Perú; color, espacio, materia, austeridad, sencillez, agua, sol, sombra, jardín, los materiales de la arquitectura.
El grandioso ejemplo de esto es el Convento de Santa Catalina, una manzana de 20.000 m2 afortunadamente ganado para la ciudad hace 30 años en forma de museo donde aun habitan 30 monjas de clausura. Entre enormes muros, patios porticados, celdas con cocina y patio privado, callejuelas, fuentes, cubiertas inclinadas de cañizo y teja, ventanas con vidrios a hueso, laberínticas relaciones de continuidad entre las estancias y tres colores; sanguina, punteada por el verde de cactus y frutales, añil, que convierte milagrosamente paredes y escaleras sin barandilla (quememos el Código Técnico) en cielo, haciéndolas desaparecer, y blanco, definen a esta ciudad robada a la ciudad. Ascensos a los cielos al estilo de la canción de los Zeppelin, desde aquí, desde el Misti, desde las cubiertas planas de la ciudad, en una donde resuenan la tranquilidad y la bohemia y donde algunos viajeros alargamos las visitas más allá de lo previsto. 



Sobre esto, aparecen la superposición, los estratos, la actualización y modernización de la tradición real como poso de la civilización, la mezcla ciudadana, histórica, urbana, el terrible peligro sísmico que evita disparates babélicos, la animada vida local que logra imponerse a la temática de los turismos y el agradable ambiente de nuestro hospedaje, Pichín and co. con sus incursiones en los peligros de la noche peruana y pese a su servicial servidumbre con los gringos. Algunas, 6 meses viajando por América Latina y ni una palabra de español... ¡si ya existen las visitas virtuales!

Arequipa, Rothkos arquitectónicos.